Iniciativa de desarrollo comunitario participativo en la aldea de Chipenhe, distrito de Limpopo, Mozambique

Área de Cooperación Internacional para el Desarrollo y los Derechos Humanos

La presente intervención, ejecutada con financiamiento de la Diputación de Granada desde abril de 2018 a abril de 2019, se ha insertado dentro de la estrategia de intervención que la Asociación para el Desarrollo de las Comunidades Rurales (ADCR), socio local del proyecto, tiene en la zona, alineada en todo momento con el Plan Estratégico de Desarrollo Distrital (PEDD).El objetivo de la misma era mejorar las condiciones de la Escuela Secundaria General de la comunidad de Chipenhe en el distrito de Limpopo, provincia de Gaza, mediante el equipamiento de las aulas y la revitalización del consejo escolar, espacio de coordinación e interacción entre la escuela y las familias del alumnado. Tal y como señala en Ministerio de Educación y Desarrollo Humano (MINEDH) de Mozambique, para que la escuela pueda desempeñar con éxito su función es indispensable el refuerzo del diálogo, asociación e involucramiento de toda la comunidad escolar en la planificación y gestión de la institución. La participación de la comunidad es necesaria para trazar objetivos conjuntamente y para dar legitimidad al proceso, preservando los principios de gestión democrática.

                                                                               

                                                                                                         - Fotografías de la Escuela Secundaria de Chipenhe, en el distrito de Limpopo, Mozambique - 

Al finalizar el proyecto se ha comprobado una reducción en los casos de abandono escolar respecto al año anterior. Si bien es cierto que sería muy pretencioso vincular estos datos con los modestos logros alcanzados por el proyecto, no hay motivos para restar importancia a lo realizado en el marco de la intervención. El aprovechamiento escolar o la reducción del abandono de los estudios tienen causas demasiado profundas (prácticas culturales, situación económica familiar, etc.) como para ser tratadas eficazmente con un proyecto tan limitado en recursos y tiempo. Sin embargo, dotar de mobiliario adecuado a las aulas es el primer paso para dignificar tanto al alumnado como al equipo docente, creando unas condiciones apropiadas para el aprendizaje. La atención que una persona puede prestar estando sentada en el suelo durante varias horas (sujeta, además, al frío en invierno) así como los problemas derivados de una inadecuada higiene postural al escribir o practicar materias específicas como dibujo, no tiene comparación con permanecer sentados adecuadamente.

Por otro lado, gran parte de la consecución del objetivo propuesto pasaba por contar con un consejo escolar dinámico y operativo, que generase un espacio de coordinación y colaboración entre toda la comunidad educativa desde el fortalecimiento de las capacidades de todos y cada uno de sus miembros. Contar con un espacio de este tipo, vínculo de unión con la población, permite afrontar eficazmente los problemas con los que se pueden encontrar las chicas y chicos de las comunidades para ejercer su derecho a la educación (incluyendo resistencias de algunas familias, que ven de mayor utilidad el trabajo en el hogar y en los campos de cultivo); además de servir de motor de desarrollo en la zona para la consecución, a  través de la escuela, de mejoras que tengan que ver con el bienestar de las personas. 

Por su parte, los logros que ha conseguido la propia escuela gracias a su esfuerzo, fruto tanto de su relación con el Gobierno Distrital como con otras organizaciones privadas, ha incidido de manera significativa en mejorar la situación educativa de la comunidad de Chipenhe. En 2018, el Gobierno Distrital de Limpopo entregó 500 pupitres, mesas y sillas para algunas aulas, así como el mobiliario necesario para la oficina de administración y numerosos libros para la biblioteca. Con sus propios recursos, la escuela adquirió algunos equipos básicos (fotocopiadora, ordenador y ventiladores), mejoró la iluminación de algunas aulas y de la oficina de administración, construyó dos baños para el alumnado, rehabilitó el suelo de algunas aulas del 2º ciclo, incrementó el sistema de canalización de agua hasta las salas anexas de la escuela e instaló una sirena para las llamadas a clase.

Con el apoyo del Servicio Distrital de Actividades Económicas (SDAE) se estableció un campo de multiplicación de hortalizas y se reactivó el campo de cultivo para la escuela, donde se ha plantado media hectárea de yuca. Esto ha favorecido el refuerzo educativo entre la teoría y la práctica, puesto que estamos hablando de contextos rurales donde la totalidad de las familias son campesinas. En coordinación con el Servicio Distrital de Educación, Juventud y Deporte (SDEJT) se celebró una feria multisectorial que incluyó temas de salud, exposición de productos agropecuarios, experimentos científicos, educación vial, etc.

En el ámbito de las relaciones con otras entidades privadas, se recibieron más de mil plantas para el acondicionamiento de espacios verdes dentro de la escuela así como para crear un perímetro alrededor hecho con barreras naturales. Además, en el marco del programa contra el abandono escolar de las chicas, se llevaron a cabo campañas de sensibilización sobre los derechos de las mujeres y niñas y se becaron 50 personas (especialmente alumnas) con uniforme escolar y material didáctico diverso. También se adquirió equipamiento para el cantinho escolar, que funciona como núcleo de divulgación y sensibilización entre el alumnado de información sobre salud sexual y reproductiva.